Secreción vaginal: ¿Por qué cambia y qué significa?
¿Qué es una secreción vaginal "normal"?
Lo más importante que debes saber sobre las secreciones vaginales:
La secreción vaginal es frecuente y variará a lo largo de tu ciclo menstrual
Las secreciones son una manera de determinar la fase del ciclo menstrual en la que te encuentras
Las secreciones vaginales inusuales o atípicas difieren en color, consistencia, olor o cantidad en comparación con las secreciones habituales
Una secreción vaginal inusual puede ser síntoma de un desequilibrio bacteriano, una infección o una ITS, o en casos raros, de cáncer de cuello de útero
Para mantener tu vagina saludable, evita las duchas y usa protección durante la actividad sexual
Tu vagina tiene un ecosistema dinámico y delicado. Consiste en un equilibrio específico de bacterias, pH y humedad. Este equilibrio es sensible a los cambios tanto internos como externos de tu cuerpo, y no siempre hace falta mucho para "desequilibrarlo".
Es frecuente notar distintos tipos de flujo vaginal a lo largo del ciclo menstrual: cambia cíclicamente junto con tus hormonas en aspecto, consistencia y volumen.
La secreción vaginal también cambia cuando te excitas, y durante y después del embarazo. Sin embargo, los cambios significativos o repentinos en el olor, el color o la consistencia de tu secreción pueden significar que ocurre algo más, como una infección que necesita tratamiento.
El seguimiento de secreciones vaginales "atípicas" en Clue proporciona un registro de los síntomas que puedes compartir con tu profesional de salud, incluyendo cuándo empezaron los cambios y qué otros factores pueden estar relacionados (como relaciones sexuales sin protección o el inicio de un nuevo método anticonceptivo).
Es importante que te familiarices con tu secreción vaginal "típica", propia y única, en cuanto a olor, color y cambios a lo largo del ciclo.
¿Qué se considera una secreción vaginal "normal"?
Color y consistencia de la secreción vaginal
La secreción cambia junto con la producción de flujo cervical en tu cuerpo. Tu secreción cambiará junto con la producción de secreción cervical de tu cuerpo. Al principio del ciclo, tiende a ser más seca y pegajosa, o puede que no notes ningún flujo (1). Se vuelve cremosa y blanquecina en la fase folicular media o tardía (la primera fase del ciclo) (2). Es probable que tengas una secreción clara justo antes y alrededor de la ovulación, similar a la clara de huevo elástica y húmeda (3,4). Poco después de la ovulación, suele volverse más espesa y pegajosa (4). Aquí puedes leer más sobre estos cambios. La secreción puede parecer blanca o ligeramente amarillenta y pastosa en tu ropa interior cuando se seca (4).
Una de cada cuatro personas que rastrea la secreción vaginal con Clue rastrea la secreción "cremosa"
Cantidad de secreción vaginal
La mayoría de las personas notarán que su flujo aumenta a lo largo de la primera fase de su ciclo, produciéndose la mayor parte del flujo en los días previos a la ovulación e incluyendo ésta (5). A continuación, el volumen de líquido disminuye uno o dos días después de la ovulación, debido al aumento de progesterona, hasta el final del ciclo (5). Probablemente también notarás que tu vagina produce más secreción cuando te excitas (6).
Más de una de cada cinco personas que hacen un seguimiento de su secreción en Clue lo hacen alrededor de la ovulación
Olor de la secreción vaginal
La secreción típica puede ser inodora o tener olor, pero normalmente es suave y no desagradable (7). Puede mezclarse con algo de orina o sangre en el momento de la regla, lo que puede influir en el olor de tu ropa interior. Conocer tu olor típico puede ayudarte a identificar cuándo cambia algo.
Quienes utilizan métodos anticonceptivos hormonales pueden tener experiencias diferentes del flujo vaginal debido a la influencia de hormonas externas (5).
Signos de una secreción vaginal "atípica"
La secreción vaginal atípica es diferente de la habitual en cuanto a consistencia, color, volumen y olor. Puede ser signo de una infección, entre otras cosas:
Vaginosis bacteriana (8)
Secreción fina gris, verde o blanca
Olor a pescado, a humedad o a podrido
Otros síntomas incluyen dolor genital, picor o ardor vaginal
Candidiasis vaginal (9)
Secreción espesa, blanca y grumosa, como requesón
La secreción no huele, o tiene un ligero olor “raro"
Otros síntomas son picor, hinchazón, irritación, dolor al orinar o enrojecimiento genital
Tricomoniasis (9,10)
La mayoría de las personas no presentan síntomas o sólo síntomas leves
Gran cantidad de secreciones verdes o amarillas
Secreción fétida o con olor a pescado
Otros síntomas incluyen picor, ardor o dolor genital
¿Qué causa la secreción vaginal atípica?
El flujo atípico puede producirse cuando la comunidad microbiana de la vagina se desequilibra (9). Esto quiere decir que hay una disminución en la cantidad de microbios "buenos" y un aumento de microbios "malos" (o un sobrecrecimiento de algo que normalmente esta presente en pequeña cantidad). Estos desequilibrios pueden provocar las afecciones mencionadas anteriormente, como la vaginosis bacteriana (también conocida como VB, una infección bacteriana, la causa más frecuente de secreción atípica) (8) y las infecciones por hongos (candidiasis vulvovaginal) (9).
Factores que pueden alterar el ecosistema vaginal:
Duchas vaginales y prácticas de limpieza (11,12)
Uso de espermicidas (9)
Relaciones sexuales, tener una nueva pareja sexual o múltiples parejas sexuales (11)
Presencia de un DIU (13,14)
Sangrado o manchado prolongados o irregulares (14)
Uso de antibióticos (9)
Menarquia, menopausia o embarazo (15,16)
Cambios hormonales a lo largo del ciclo menstrual (15)
Diabetes no controlada (17)
En general, tienen menos bacterias Lactobacillus vaginales (14)
Fumar cigarrillos (11,18)
Dieta (16) (pero se necesita más investigación)
Las infecciones de transmisión sexual (ITS) también pueden provocar secreción vaginal atípicas. La ITS no vírica más frecuente es la tricomonas vaginalis, un parásito (19). Otras ITS comunes incluyen la clamidia y la gonorrea. No olvides que, a menudo, estas ITS son asintomáticas (no tienen síntomas evidentes), por lo cual las pruebas regulares de ITS son tan importantes.
En raras ocasiones, una secreción atípica puede ser signo de algo más grave, como un cáncer de cuello uterino (20). Asegúrate de hacerte la citología regularmente.
¿Qué debo hacer si tengo una secreción vaginal atípica?
Si tienes una secreción espesa y blanquecina, con ardor o comezón, y sospechas que puedes tener una infección vaginal por hongos levaduriformes:
Puedes probar con un tratamiento de venta libre primero. Estos vienen, normalmente, en forma de píldora/supositorio o crema vaginal. Si los síntomas no desaparecen después de una semana o presentas infecciones a repetición, consulta con un profesional de la salud. Las infecciones por hongos levaduriformes, por lo general, no son perjudiciales, pero debes asegurarte de que tus síntomas no se deben a algo más. La aplicación de una compresa fría puede ayudar a aliviar la comezón. Ten presente que los tratamientos contra las infecciones vaginales por hongos levaduriformes pueden comprometer la integridad de los condones y los diafragmas de látex (21).
Si presentas otros síntomas:
Acude a tu médico para que te haga una prueba. Te examinarán la vulva y la vagina y tomarán una muestra (frotis) para examinarla al microscopio o enviarla a un laboratorio. Es posible que también midan el pH de tu vagina con una banda medidora de pH.
Es posible que si presentas síntomas como comezón y/o mal olor, quieras usar una ducha para aliviarlos. ¡Aguántate las ganas! Las duchas y los productos de limpieza no ayudan y, de hecho, pueden empeorar las cosas (11,12).
La vaginosis bacteriana (VB) puede desaparecer por sí sola, pero a menudo requiere tratamiento (22). Incluso con tratamiento, la VB puede reaparecer con frecuencia (22). La VB puede crear síntomas molestos y aumentar el riesgo de contraer una ITS (22), pero no suele provocar complicaciones de salud. No obstante, en algunos casos, si la VB no recibe tratamiento, puede llevar a infecciones después de una cirugía ginecológica, o a complicaciones en el embarazo, tales como abortos espontáneos o partos prematuros (23,24). La VB puede contribuir al desarrollo de la enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), pero aún se necesita más investigación en este campo (25).
¿Cómo se tratan las enfermedades que provocan secreción vaginal?
El tratamiento de la VB o de una ITS como tricomonas, clamidia o gonorrea suele ser bastante sencillo y puede consistir en ponerte un gel o una crema antibiótica en la vagina durante varios días o tomar un antibiótico por vía oral o inyectable (según el tipo de infección) (26).
Una infección que no ha recibido tratamiento y presenta complicaciones, puede necesitar una intervención mayor. Ten en cuenta que muchas ITS no causan síntomas o permanecen asintomáticas durante mucho tiempo (27). Esto no significa que no necesiten tratamiento lo más pronto posible. Si eres sexualmente una persona sexualmente activa, es crucial que te realices pruebas de ITS con regularidad.
La evidencia sobre uso de ciertos alimentos y suplementos para recuperar y/o mantener el equilibrio saludable de las bacterias vaginales no es concluyente. No hay suficiente evidencia para justificar la inclusión de yogur o probióticos de Lactobacillus en las recomendaciones formales de tratamiento (28), aunque puede que ciertas personas sientan algún beneficio y es poco probable que sean perjudiciales para la salud (28). Se requiere más investigación.
Algunas investigaciones han sugerido que el ajo y el aceite del árbol del té pueden tener propiedades antimicrobianas y que cada uno de ellos puede ser eficaz contra ciertos tipos de bacterias que causan infecciones vaginales (29,30). Sin embargo, la investigación sobre estos tratamientos alternativos es demasiado limitada para sacar conclusiones
Formas de mantener tu vagina saludable
Cómo evitar la alteración del microbioma vaginal:
No uses duchas
Mantén el jabón espumoso y perfumado lejos de tu vulva (o evita por completo usar jabones en tu vulva y vagina)
Usa siempre protección con parejas nuevas o que no se hayan hecho pruebas de laboratorio
Usa una barrera nueva (como un condón) cuando cambies de sexo anal a sexo vaginal durante la relación sexual
Un entorno vaginal sano te hará menos propensa a contraer una ITS y te ayudará a evitar síntomas molestos y posibles complicaciones de salud.
Preguntas Frecuentes
¿Es más fácil contraer una ITS durante la fase lútea del ciclo menstrual?
Tienes una mayor probabilidad de contraer una ITS durante la fase lútea (la segunda parte de tu ciclo, después de la ovulación), cuando tu sistema inmune no es tan fuerte (31). En la fase lútea, tu cuerpo crea un entorno que hace más posible el embarazo, en el que un óvulo puede ser fecundado e implantarse en el útero, sin que tu sistema inmunitario se interponga.
¿Qué significa una secreción amarillenta?
La secreción puede parecer amarilla por varias razones. Para algunas personas, el flujo amarillo pálido sin irritación ni olor es típico durante todo el ciclo. A veces, la secreción seca puede aparecer amarilla en tu ropa interior.
Sin embargo, si tu secreción ha cambiado de color recientemente, o si el color va acompañado de otros síntomas como picor, irritación, hinchazón u olor, considera la posibilidad de consultar a un profesional de salud para descartar una infección.
¿Por qué tengo secreciones vaginales?
Después de la pubertad, ¡todas las personas con vagina tendrán algún tipo de secreción vaginal! Lo que es normal para cada persona puede variar ligeramente en cuanto a cantidad, color y consistencia. Sin embargo, la secreción siempre debe ser leve y no suele causar molestias. La secreción vaginal ayuda a limpiar la vagina eliminando las células viejas y muertas. Contiene unas bacterias llamadas lactobacilos que ayudan a mantener el pH adecuado y a mantener sana la vagina (7).
¿Qué significa una secreción blanca espesa?
Puedes notar un flujo blanco y espeso durante la segunda mitad del ciclo menstrual, la fase lútea. El aumento de progesterona en este momento hace que el moco cervical se espese y se vuelva más pegajoso (1). La secreción también puede ser cremosa y blanca entre la regla y la ovulación (32).
Si la secreción blanca y espesa va acompañada de enrojecimiento, picor, quemazón o hinchazón, podría indicar una infección por hongos. Un cambio repentino en tu flujo, especialmente junto con otros síntomas, debe ser evaluado por un profesional sanitario.
¿Qué significa secreción marrón después del sexo?
La secreción de color marrón suele deberse a la presencia de sangre. El sangrado después del sexo puede producirse si hay fricción por falta de lubricación vaginal. La sequedad vaginal puede ser hormonal (33).
A veces, los cambios en el cuello uterino pueden hacer más probable un sangrado después del coito. Incluyen cambios benignos como los pólipos cervicales (crecimientos no cancerosos) y el ectropión cervical (cambio hormonal en el tipo de células que se encuentran en el exterior del cuello uterino). En raras ocasiones, el sangrado después del coito también puede ser un signo de cáncer cervical o uterino (33).
En algunas personas, el sangrado después de mantener relaciones sexuales puede ser un signo de infección. Esto es especialmente cierto si hay otros síntomas, como dolor u olor (33).
También hay otras enfermedades, como la endometriosis, el prolapso de órganos pélvicos o el liquen escleroso, que pueden provocar hemorragias después del sexo. Suelen ir acompañados de otros síntomas (33).
Debido a las muchas causas diferentes del sangrado después del sexo, es importante que prestes atención a tu cuerpo. Hacer un seguimiento de tus síntomas puede ayudarte a notar tendencias. Si una secreción marrón después del sexo se produce con frecuencia o junto con otros síntomas, lo mejor es que te examine un médico.
Este artículo fue publicado originalmente el 7 de agosto de 2017.